1. Estudiar… ¿Para qué?
Para aprender diferentes algoritmos que nos ayuden a resolver problemas de
la vida cotidiana con mayor facilidad que como lo haríamos sin la ayuda de
estos y así poder elegir forma de vida que más nos agrade.
2. ¿Qué tipo de enseñanza se requiere?
Una enseñanza en la que se promueva la reflexión y la comprensión de los
contenidos y no simplemente se presente el enciclopedismo o la memorización a
corto plazo; además se debe buscar el desarrollo de competencias necesarias
para la vida en sociedad
3. ¿Cuáles serian las evidencias de la enseñanza?
Por medio de una evaluación tanto cuantitativamente como cualitativamente
donde por medio de un proceso minucioso se muestren tanto los avances que
muestran los alumnos como las dificultades que presentan para así poder tener
una idea hacia dónde debemos encaminar nuestras actividades y cómo podemos
hacerlo
4. ¿Por qué cambiar la enseñanza?
Por qué seguimos inmersos en una educación
tradicionalista en la que se premia al alumno que recita un texto sobre el que
lo comprende, se ha visto que en este tipo de enseñanza el alumno simplemente
dice lo que el maestro quiere escuchar sin importar que realmente se lleve a
cabo una reflexión de por medio, lo que ocasiona que los conocimientos no se
practiquen en la vida cotidiana. La resolución de problemas es una simple
mecanización de procedimientos donde al cambiar un dato del mismo que no afecta
el sentido del problema, los alumnos no logran descifrar dicho interrogante.
5. ¿Cuáles son las posibilidades de aplicar la metodología presentada en la
escuela telesecundaria?
Sabemos que es muy complicado llevar a la práctica
estas técnicas de enseñanza, ya que depende en gran medida de las condiciones
del grupo pues ciertas estrategias que resultan eficaces con unos alumnos
pueden no serlo con otros. Sin embargo si nos lo proponemos podemos hacer
muchas cosas, debemos analizar arduamente a los jóvenes, modificar estrategias,
adaptándolas al contexto y así poco a poco y con paso firme lograr al menos un
cambio positivo en los alumnos. El cambio comienza en nosotros mismos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario